En la Roma antigua las cárceles no eran muy abundantes porque el derecho romano imponía como penas habituales la ejecución, el exilio o los trabajos forzados que se consideraban más apropiados.
Así, mantener a alguien en un espacio cerrado, viviendo a costa del erario público sin producir se consideraba inadmisible. Por éso no había muchas cárceles. Sin embargo, en Roma ha sobrevivido una, la Cárcel Mamertina.
La Cárcel Mamertina fue construida en origen hacia el 600 aC. Era conocida con el nombre de Tulianum, por el supuesto nombre de un rey de los primeros gobernantes romanos. El nombre de Cárcel Mamertina tiene un origen medieval y parece provenir del cercano templo de Marte romano.
Sin embargo, la Cárcel Mamertina tuvo en sus inicios un uso totalmente distinto. Se habilitó para guardar caudales de agua como cisterna para el abastecimiento de agua.
Con el tiempo, el espacio acabó por convertirse en cárcel con dos únicas celdas, una encima y otra debajo, en las que, en cualquier caso, los penados no pasaban mucho tiempo. Porque se les confinaba en las celdas a la espera de juicio, o bien se les encerraba a la espera de salir hacia el patíbulo de ejecución.
En la Cárcel Mamertina, en cualquier caso, fueron encerradas personas ilustres, como Gayo Poncio, líder de los samnitas, Yugurta, jefe de los numidas que murió de hambre entre sus muros o Vercingétorix, famoso rey de los galos.
Milagro de San Pedro
Con el tiempo, ya en época cristiana, el lugar comenzó a ser venerado por haberse producido un milagro en su interior atribuido a San Pedro. San Pedro fue encerrado por sus creencias por los romanos y hizo manar un manantial de agua en el suelo de la celda para bautizar con él.
Después de su muerte y autorizado el culto cristiano, los peregrinos tuvieron el lugar como un espacio venerable y comenzaron a acudir a él y también con el tiempo se colocó un altar para conmemorar el hecho.
La Cárcel Mamertina está justo debajo de dos iglesias superpuestas construidas mucho tiempo después para celebrar estos hechos milagrosos. Son las de San Giuseppe dei Falegnami (situada arriba) y la San Pietro in Carcere (ubicada abajo). En el interior de la Cárcel Matermina los visitantes pueden ver una extraña cruz puesta del revés. En alusión a San Pedro que se cree que fue crucificado al revés. Ése es el motivo.
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