John Keats fue un poeta romántico británico tan amado por sus letras como lo es Bécquer en la literatura española. A Keats se le puede encontrar entre los renglones de su literatura, pero también en su santuario en Londres, en la Keats House, un museo dedicado a la figura del poeta en el que el visitante puede tener esa extraña sensación que se tiene cuando se visita una casa natal o el lugar en el que surgió la creatividad de una artista, que el tiempo se ha detenido y que la voz del biografiado está más presente que nunca.
Croydon no está en la listas de destinos de los vuelos que aparecen en cualquier panel de salidas de los aeropuertos. Pero hubo un tiempo en que este aeródromo británico, situado a diez kilómetros del centro de Londres, fue la unión más internacional de la capital británica con el mundo por vía aérea.
El Bosque de Epping es una extraordinaria zona boscosa situada en el corazón de Londres que atesora un extraordinario valor biológico. En el Bosque de Epping se tiene la oportunidad de disfrutar de un entorno perfecto para pasear, pero también para sentir la naturaleza en su estado puro.
No sé si alguna vez has reparado en el nombre de Cambridge. Es una unión de palabras. Bridge, puente en inglés, y Cam, el río que atraviesa la ciudad. Así, Cambridge sería ‘Puente del Cam’, o algo así.
La imagen que tenemos los que hemos visitado Londres es la de un río Támesis que discurre plácido, tranquilo y en su nivel, siempre en el mismo nivel. Más que una frontera urbana, el Támesis es un espacio más de la ciudad.
¿Te fascina la ciencia? ¿te maravillan esos artilugios antiguos que más que herramientas de ciencia parecen instrumentos de tortura?. Entonces no tienes que perderte el Museo de Historia de la Ciencia de Oxford. Una institución singular en una ciudad universitaria singular. Si viajas a Oxford, no dejes de visitar el Museo de Historia de la Ciencia de Oxford. Te sorprenderá.
Stonehenge es la joya de la corona de la prehistoria británica. Su colosalidad hace palidecer a otros yacimientos más valiosos pero menos espectaculares. Sin ir más lejos, hace palidecer al de Woodhenge, situado a unos pocos cientos de metros de él y que ignoran muchos visitantes que acuden a los grandes círculos de piedra. Woodhenge es, digámoslo así, el pariente pobre de Stonehenge.
¿Te animas a dar vueltas y vueltas sobre el cielo de Londres?. ¿Dónde?, ¿cómo?, ¿por qué?. El porqué lo pones tú con tus motivaciones, el dónde, en Londres, como te digo, en el Distrito de Lambeth. El cómo, a bordo de un ingenio mecánico de más de cien metros de altura, un mirador circular montado para tocar el cielo de la capital británica.
El centro de la ciudad inglesa de Bath ofrece un atractivo cultural que no es muy conocido por los visitantes extranjeros, un pequeño y coqueto museo de arte oriental. El Museo de Arte de Asia Oriental, el Museum of East Asian Art de Bath.
La ciudad universitaria de Cambridge acoge un curioso museo polar que forma parte de un instituto de investigación que recoge la memoria de un explorador antártico británico, el capitán Robert Falcon Scott. Scott condujo en 1911 una malograda expedición polar que aspiraba a conquistar el Polo Sur.
Para muchos viajeros que acuden a conocer Oxford, la ciudad es su universidad y todo lo que la envuelve, su espíritu académico conservador, sus edificios, el ambiente estudiantil… Pero, Oxford es mucho más. A poco que se camine por las calles del centro, que se recorra el extrarradio y las cercanías de esta ciudad, no resulta difícil caer en la cuenta de que Oxford es muchísimo más que su famosa universidad.
Trafalgar Square es una de las zonas más emblemáticas del centro de Londres. Miles de personas acuden cada día de paso, otras a visitar el lugar para acercarse a un espacio que tiene mucho de museo al aire libre, pero también para encontrarse en un lugar que es un meeting point perfecto.
No sé si conoces el curioso caso del Millenium Bridge de Londres. El Puente del Milenio de Londres si se hubiera construido en otra época se habría considerado como un paso sobre el Támesis endemoniado y tal vez lo hubieran echado abajo a las primeras de cambio.
Las cinco de la tarde es hora del té en Londres, y, si quieres también pastas… y lo que caiga. ¿Se puede visitar Londres y no tomar un té a su hora?. Creemos que no, que no tiene perdón. Para los que quieran viajar a Londres, hacerlo bien y tener un recuerdo de un buen té tomado a las cinco de la tarde y en un lugar emblemático, tenemos las invitaciones perfectas. Ocho teterías de Londres donde tomar un té en Londres y disfrutarlo. Te lo contamos:
Londres no siempre recibe a sus visitantes con cielos azules y soles de postal, es frecuente que incluso en verano, algún chaparrón ahogue una tarde. Por esa razón, hay que estar prevenidos para cambiar de planes. Y mucho más si se viaje en familia y con niños pequeños. Esta que sigue es una lista de los lugares que se pueden visitar en Londres cuando el tiempo no está de nuestro lado, ocho salidas en familia en Londres y para días lluviosos:
¿Conoces el Museo de Cera de Madame Tussauds? No? Es el más antiguo del mundo en su género y tiene ese punto kitch y retro que seguro que te encantará. Te cuento algo del museo y de su fundadora, Madame Tussauds.
El río Támesis es uno de los atractivos principales de la ciudad de Londres. Forma parte de su naturaleza. La ciudad nació en una planicie regada por el río y vivió conectada con sus aguas. Sus puentes más que saltar el río lo abrazan, uniendo distritos y entrelazando el callejero.
Parliament Hill es una de las zonas verdes con más encanto de la ciudad de Londres. Por su condición de parque urbano, pero también por el lugar en el que se encuentra, en el noroeste de la capital y sobre una altura respetable del terreno que permite descubrirla desde las alturas, de otra manera.
Pasear por los restos aún en pie de las murallas de Canterbury en una tarde soleada de verano es una experiencia grata. Una experiencia que ofrece al viajero la oportunidad de retroceder en el tiempo hasta la época romana para descubrir una ciudad inglesa que ofrece al visitante un patrimonio singular en las Islas Británicas.
La Iglesia de St Bene’t es el templo religioso más antiguo, no sólo de Cambridge, sino del condado de Cambridgeshire. Lo más importante de la iglesia es la torre anglosajona de St Bene’t del siglo XI.
El Castillo de Oxford es una construcción medieval de estilo normando que ha sobrevivido hasta nuestros días, es cierto que en ruinas, pero ahí está como uno de los atractivos del patrimonio de la ciudad que se pueden visitar. Una construcción, en cualquier caso, muy original en su concepción.
En Windsor, el palacio real se lleva todos los honores y reconocimiento público y muchos conjuntos igualmente históricos resultan desconocidos incluso para no pocos británicos. Uno de esos edificios de gran importancia histórica, pero que resultan ensombrecidos por la magnificencia del Palacio de Windsor es el Windsor Guildhall.
Hay muchos lugares interesantes en Londres que incluso desconocen los mismos londinenses. Galerías de arte con muestras pintorescas, estaciones de tren que no lo son en realidad, lugares para cenar a oscuras, sitios únicos para selfies especiales, fantasmas gritones, casas invisibles y ríos que no están ni se les espera. Siete lugares únicos de Londres poco menos que imposibles. Son éstos:
No lejos de la sombra de la Catedral de Salisbury al viajero le asalta una imagen recortada sobre la plaza principal de la ciudad. Se trata de la Poultry Cross, un templete gótico que servía para la venta de aves de corral y de huevos en los días de mercado de la ciudad.
En la localidad de Bath se levanta un curioso edificio de vecinos antiguo que representa un homenaje de otra época a las habilidades constructivas de los clásicos. Lo llaman Circo pero no lo es, le decían ‘El Circo del Rey’, pero ningún rey puso su pie en el lugar. Para algunos es uno de los cinco edificios de la arquitectura británica más representativos. ‘El Circo’ de Bath.