El lujoso Palacio Topkapi es una de las visitas obligadas de Estambul. Fue residencia de los sultanes otomanos durante 400 años y conserva alguna de las reliquias más importantes del mundo musulmán. Se extiende a lo largo de la costa del Bósforo y es una obra maestra de la arquitectura otomana. Déjese guiar por su guía a través de los edificios y habitaciones del complejo donde se celebran eventos de la realeza y encuentros de jefes de estado.
Hay 4 patios dentro del palacio por los que pasaremos antes de ir a la Tesorería Real donde se guardan objetos de incalculable valor. Aquí encontrará la fantástica Daga Topkapi con incrustaciones de esmeralda, los candelabros gigantes de diamante y reliquias islámicas sagradas como la huella en arcilla del profeta Mahoma. Además, visitaremos también las espectaculares cocinas donde se preparan auténticos festines y verá la colección de vestidos imperiales y documentos antiguos que aún se conservan en el palacio.
El señorial patio de Santa Sofía es el siguiente punto del recorrido. El mausoleo de los sultanes se encuentra aquí y ha sido restaurado y recuperado su antiguo esplendor. Mehmed III, Selim II, Murad III, Ibrahim I o Mustafa I, junto con sus familias, descansan bajo tierra en este lugar.
La decoración de la cámara mortuoria incluye azulejos de cerámica del siglo XVI con motivos florales en morado, rojo, verde y azul. Las batas de Príncipe y una pequeña pieza de la manta que cubre la Kaaba –que es la construcción sagrada en forma de cubo de la Meca- se muestran en los sarcófagos. Estos son los vestigios de los excesos que el sultán exigía y que han perdurado hasta nuestros días.
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El Palacio de Topkapi cierra los martes, por lo que la visita se reemplazará por un recorrido por las huellas del Imperio bizantino.
Ls mezquitas cierran los viernes, ese día sólo se visitará el exterior.
